El Land
Art, como hemos podido observar, es un movimiento artístico muy creativo y muy
libre. A su vez, de una manera transversal trata de cuidar el medio ambiente y
la naturaleza que nos rodea, y además, busca sacar el arte al exterior, es
decir, pretende trabajar en espacios abiertos.
Por lo tanto, prestando atención
a estas ideas, podemos considerar indudablemente, que el Land Art es un
movimiento muy apropiado para la enseñanza. En realidad, hoy en día la
educación todavía no ha llegado a construir un método claro para trabajar bases
o fundamentos como los que son el de este movimiento artístico. Por ese motivo
el Land Art podría ser una herramienta o un recurso muy adecuado para trabajar
esas bases o fundamentos que se han mencionado anteriormente,
así como la
creatividad, la libertad, la conciencia sobre el medio ambiente, etc.
Para ello, Rebeca Freiria
publicó en su blog una de las metodologías que podría ser la más adecuada para
la introducción del Land Art en las escuelas.
Esta metodología debería ser
siempre activa y participativa, donde los alumnos también trabajarán la
cooperación y la creatividad con el fin de conseguir sus objetivos. El objetivo
es que los alumnos trabajen en todo momento de una forma autónoma siendo dueños
de su propio aprendizaje, que desarrollen su creatividad, y que apliquen sus
ideas como quieran. Los profesores sin embargo, serán únicamente un guía de las
actividades en el proceso de aprendizaje de los alumnos, es decir, deben
orientarles y aconsejarles pero siempre sin limitarles ni coartarles, ya que
como se ha mencionado anteriormente ellos deben ser los dueños de su propio
aprendizaje.
Para ello, debemos basarnos en
los siguientes principios metodológicos:
En primer lugar, para que estas
actividades se desarrollen bien es importante que el alumno relacione sus
experiencias con nuevos aprendizajes, por lo que para ello, es una buena opción
comenzar con una asamblea inicial donde habrá espacio para hablar sobre que les
sugiere el Land Art, o que experiencias han tenido ellos respecto a este
movimiento.
El principio o fundamento de cada
actividad será que desenvuelvan tanto su capacidad física como mental, a través
de la manipulación o la experimentación de los elementos de la naturaleza.
La introducción del Land Art se
hará a modo de juego, ya que el juego es la actividad fundamental de esta
etapa, y este hace posible la adquisición de aprendizajes significativos, es
decir, conocerán el sentido de este nuevo arte a través de actividades que se
les serán presentadas como juegos.
El material que se debe utilizarse,
o que sería lo más apropiado, es el material reciclado y natural, para así
inculcar y promover la conciencia sobre el valor del medio ambiente y el
cuidado de este. De este manera, siendo también coherentes con los principios
mencionados al principio.
La organización del espacio y el
tiempo deberá ser favorable a la autonomía y flexibilidad de cada alumno. Cada
uno de ellos deberá disponer del tiempo que necesite para su aprendizaje, y la
mayoría de las actividades se desarrollarán al aire libre. Esto les favorecerá
ya que estarán en contacto con la naturaleza y aprenderán a trabajar en
espacios abiertos como bosques, lagos, campos, etc.
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